Medición de contaminantes


Para apopyar este preyecto, necesitamos Guias de montaña y montañistas que tomen muestras de nieve, tambien realizamos campañas de limpieza en las montañas, durante etas campañas de lipieza, se colecta y clasifica la basura colectada para su posterior analisis. Participa en las campañas de limpieza.

La nieve precipita junto con partículas sólidas micrométricas (aerosoles atmosféricos) y gases que se acumulan en los poros de la nieve. Entre los principales aerosoles precipitados en la nieve, y acumulados (registrados) en hielo glaciar se encuentran:

1) Particulas de carbono (carbono negro) y metales pesados derivados de fuentes naturales y antropogenicas.

Desde 2006 y hasta 2023 se han colectado muestras de nieve superficial y hielo glaciar de las Montañas Iztaccíhuatl y Citlaltepetl, centro de México. Los datos indican concentraciones de varios metales pesados (V, Cr, Ni, Cu, Zn y Pb) comparables a los de algunos glaciares de los Andes. Por ejemplo, comparando datos de un núcleo de hielo a diferentes profundidades del Glaciar del Sajama, Bolivia con los promedios de montañas mexicanas se aprecia que concentraciones de V, Cr y Pb son mayores (hasta un orden de magnitud) en montañas mexicanas. Las concentraciones de Zn y Cu son hasta de 3 órdenes de magnitud mayores en los glaciares mexicanos. Este fenomeno tiene varias posibles explicaciones: las muestras de núcleos del Sajama son de una profundidad mucho mayor y representan edades mucho más antiguas.

Las muestras de México representan la gran actividad industrial en el centro de México y la cercanía a importantes zonas industriales, zonas urbanas y al volcan popocxatepetl. La nieve y hielo glaciar son de los mejores registros geoambientales de metales en la atmósfera.

Gracias a su color, la nieve refleja la mayor parte de la radiación solar incidente. El carbono negro al igual que otros materiales particulados, al depositarse, oscurece la nieve disminuyendo la fracción de radiación solar reflejada e incrementa la radiación solar absorbida. A su vez, mayor energía absorbida implica en general más derretimiento, tiene el potencial de afectar la disponibilidad del recurso hídrico relacionada con la presencia de un glaciar.

Entre las fuentes de carbono negro se encuentran los motores a diésel y estufas a leña, además de otras actividades relacionadas a la industria, como la minería. Este material puede viajar miles de kilómetros suspendido en el aire por lo que no hay región en la tierra sobre la que no se deposite alguna cantidad de carbono negro y su presencia sobre glaciares es permanente aunque su concentración puede variar a lo largo del año, posiblemente aumentando durante la temporada de incendios forestales.

El retroceso de los glaciares no podría explicarse sólo por la presencia del carbono negro, pero sí se relaciona al cambio climático de forma significativa.

Para la medición de carbono negro sobre la superficie de un glaciar, es necesario colectar muestras de nueve en campo, estas muestras deben ser derretidas y filtradas en policarbonato para depositar en cada filtro una carga de carbono negro proporcional a la cantidad de carbono negro contenida en la cantidad de nieve correspondiente.

La medición de la cantidad de carbono negro depositado sobre la superficie de nieve o hielo glacial será efectuada mediante el análisis de la atenuación óptica a los 880 nm causada por filtros de policarbonato impactados con impurezas de carbono negro.

Otro método, más impreciso por sus dificultades de calibración, consiste en medir directamente el aumento de temperatura o la aobrcion de luz en el mismo filtro cargado de carbono negro al ser impactada por luz visible.

2) Microplasticos en partículas micrometricas

La contaminación por plásticos es un problema ambiental generalizado debido a su comportamiento persistente y a su mayor resistencia a la biodegradación. La contaminación por plásticos ha sido objeto de gran atención en la última década debido a su potencial impacto ecológico. El aumento del uso de plásticos de un solo uso ha incrementado sustancialmente la producción mundial de plástico, que ha pasado de 5 millones de toneladas en la década de 1950 a 300 millones de toneladas en 2020 (USEPA, 2020). Según Plastic Europe, la producción de plástico en Asia representa aproximadamente el 51% de la producción mundial. En 2018, la producción de plástico alcanzó los 359 millones de toneladas métricas, con un aumento anual del 3% (PlasticEurope, 2019). La basura plástica se observa comúnmente en suelos, ríos, océanos y humedales, y su forma degradada es accesible a zonas remotas a gran altitud, como la nieve, las montañas y los glaciares, debido a su uso generalizado, durabilidad, bajo coste y versatilidad (Rillig, 2012; Napper et al., 2020; Stefánsson et al., 2021). Los macroplásticos se degradan gradualmente a niveles micro (5 mm-1 μm) y nano (<1 μm); sin embargo, no se ha informado de una mayor degradación de estos MP (microplásticos) y NP (nanoplásticos) (Song et al., 2017; da Costa, 2018). Los plásticos de gran tamaño se desintegran en trozos más pequeños, es decir, en el rango de 1 μm-5 mm, debido a las fuerzas mecánicas, la turbulencia y la degradación UV (Zettler et al., 2013; Zbyszewski et al., 2014; Andrady, 2015). Estos residuos de tamaño micro eluden el sistema de detección y aparecen en entornos terrestres y acuáticos. En la última década se ha prestado una atención considerable a los MP debido a su presencia ubicua y a su grave impacto en los seres humanos y los ecosistemas (Zhang, 2017; Zhang et al., 2017).

Lamentablemente durante los ultimos años esta desapareciendo este registro geoquimico ambiental (desaparcion de glaciares). Consideramos de suma importancia documentar este registro geoquimico glaciar antes de que desaparezcan los glaciares de esta parte del planeta.